Hoy no salí a correr.

Hay varios días, varios momentos, varias circunstancias, que me hacen recordar que tengo un blog y que quiero (necesito) actualizarlo. Aunque no lo leas, debo escribir. Tal vez sea mi razón en la tierra, proponer un arte anónimo para un ente de otro siglo. No animal, no persona, no automata. Ni que decir que tenga que ser un espectro del futuro no tal lejano. Como Asia, al que me parece una especie amorfa de futuro inmediato.
Y esto que ya escribì, este párrafo innecesario, ¿ocupa un espacio?. Que soy sino menos que una  milesima de segundo. Que soy sino menos que la unidad mínima de información de un átomo. En este devenir constante todavía hay luces que se prenden, como cuando descubro (escucho) música nueva. Que tal vez ya se hizo, que ya el grupo se separo, que tal vez el cantante se murió. Pero poco importa su historia, su momento presente. Sólo queda eso, la acción que te eterniza por siempre. 
Son tres porque el tres es el número perfecto. 








No hay comentarios: