Bochaton responde que su fuego sagrado es la inspiración. El mío es la demencia, el fingir demencia. Que no sería otra cosa que la imaginación. Pero es tan corto el vuelo creativo. No imagino nuevos mundos. No me sumergo/jo en nuevas historias. Mi imaginaciôn no crea. Solo esta para escapar a la realidad. Solo crea ( odio volver a usar “crea" ) nada. Y ahi radica lo efimero del acto artistico que uno quiere que emerga/ja pero que no sucede.
En la entrevista, también me di cuenta de que me importa más quien hace las preguntas que el entrevistado en si mismo. No es un formato cómodo para mi. A menos, claro, que me caia bien el entrevistador. Ahi si intento ver todo. Porque quisierla copiarlo. Tener su audacia y rapidez. Citar correctamente. Ser un estudioso del que tenes enfrente. Saber escuchar e improvisar. No es la primera vez que lo pienso. No solo ver para copiar. Sino ver para robar. Yo quiero ser ese por un momento. Después se me va, las ganas y las palabras. Todo junto. Al mismo tiempo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario