Segunda entrega ( te lo digo como me sale)

BENJAMIN




El año en que conocí e a David estaba en bancarrota. Entre mis divagues planeaba algún día suicidarme.
Ya no me acuerdo hace cuanto me dejo. En realidad no me quiero acordar pero siempre que veo a Benjamín veo el rostro de David “ volveré y tu serás mi esposa “. Siempre decía que iba a volver y siempre volvía, salvo un día que no volvió mas. Quien hubiera pensado que el hombre que me salvo la vida seria el mismo que me la arruinaría para siempre dejando huellas imborrables.
Yo estudiaba arte, va intentaba, en esa época. Me había estaba hartando de las criticas de mis profesores y solo iba a clases, cuando iba, para ponerme en contra de ellos y recordarles su fracasadas épicas obras.
La mayor parte de los días me lo pasaba en la plaza fumando y durmiendo. Me encantaba soñar. En casa mama me quería echar, mas de una vez me cambio la cerradura de casa, pero a pesar de vivir en un tercer piso siempre tuve la ayuda de un buen vecino para llegar a mi cuarto. Mi mama no es que no me quería pero el día que se dio cuenta que le robaba o le vendía los electrodomésticos un lazo se rompió. Una de esas noches que venia subiendo las escaleras cantado el payaso plin plin, mama me tiro toda la ropa y me grito “vos y tu infantilismo crónico que te mantenga a Carlitos Bala”. De mas esta decir que era fan de bala y un año me hice cortar el pelo estilo taza. No me importaba que sea mujer. Esa noche termine durmiendo en casa sin embargo la mitad de la ropa la perdí. No solo mama decía lo de búscate un novio, si no también las pocas amigas. Y tenían razón no tenia plata ni para un buen “gran amigo”.
No me quiero acordar, pero ese día llovía. Va, en realidad cuando lo vi no llovía. Fue un día de esos en que parece que el cielo se va a caer sobre la tierra y todos vamos a quedar aplastados por ese gigante pavimentado.
Estaba caminando para la Fac., inevitablemte tenia que ir por que era mi único refugio para la lluvia, cuando un tipo me hombrea bruscamente. Lo miro con cara de repugnancia y sigo mi camino sin importarme su expresión. Nunca fui muy atenta con mirar a los hombres y este no iba a ser la excepción. A la dos cuadras me toca la espalda y me dice “disculpa por lo de recién, no te vi venia pensando en donde me podía pasar la tarde sin mojarme”. Lo mire atentamente no a la cara si no a sus rotosas topper y di cuenta de que era confiable. Lo invite a que me acompañara que yo sabia donde pasarla bien. Tiempo después me confeso que me tuvo que hasta alcanzarme y decirme lo primero que se le ocurrió. Se habai enamorado de mi a primera vista, va eso dijo. Yo como muy tonta hasta el día de hoy que no entiendo como no note que el que me había empujado iba a dirección contraria en mi y de golpe estaba atrás mio !.
Ese día en el “bellas artes” me contó que estaba recorriendo la ciudad para encontrar un escenario para su próxima novela. Él me dijo que vivía en Chile pero en ese momento estaba alquilando una quinta en el campo. Me conto que para escribir necesitaba viajar y eso era lo que hacia. Cuando le dije mi situación no hizo otra cosa que invitarme as pasar unos dias en la quinta yo por supuesto accedi.
Los primeros meses fueron frenéticos. A pesar de que me quedaba en la quinta casi todos los días. Él viajaba, iba y volvía. O al menos eso me lo hacia suponer. Me mostraba fotos de aquí y de allá. Y todo esto y todo aquello que caí en sus brazos sin oponer resistencia.
Hasta que un día le conté que esperaba un hijo. Fue el día que mas alegría se respiro en la quinta. Hizo una gran fiesta en donde proclamo que si era varón se llamaría Benjamín.
Pero al día siguiente se fue de viaje a china excusándose de que su novela necesitaba algo de accion y que mejor que China.A pesar de que no me gustaba que se vaya tanto por que lo queria cerca mio y de nuestro hijo, accedi. Sabía que solo era maximo una semana.
Pero los días pasaron y los días fueron semanas y las semanas meses. Benjamin nacio en la propia quinta en la que yo le esperaba, en la que yo le espero......

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